En Vidriopanel somos unos fanáticos del vidrio y del cristal. Gracias a entradas anteriores conocemos cómo se crea el cristal y no sólo eso, sino que hemos hablado de varios tipos de cristales. Sabiendo de los cristales translúcidos y conociendo los cristales templados, hoy vamos a añadir nuevos conocimientos acerca de otro tipo de cristales: los cristales metálicos, también conocido como vidrio metálico.
Si quieres saber más acerca del vidrio metálico, sus usos y qué es aquello que lo hace tan especial, te invitamos a que te quedes leyendo este post.
¿Qué son los cristales metálicos?
Los cristales metálicos se caracterizan por ser aleaciones con una estructura amorfa, es decir, la falta de cristalinidad. Normalmente, se les conoce como vidrios metálicos o metales vítreos. Por lo general, tienen una estructura cúbica que se centra en su cuerpo o en sus caras. En función del tipo de metal, sus propiedades varían, pueden ser blandos o duros, y con puntos diferentes puntos de fusión.
Un metal amorfo es un material metálico que tiene una estructura desordenada a escala atómica. Una de las características de los metales aleados amorfos es que éstos no son cristalinos y tienen una estructura vítrea. Hay varias formas de producir metales amorfos, incluyendo enfriamiento extremadamente rápido, deposición física de vapor, reacción en estado sólido, irradiación de iones y aleación mecánica.
¿Qué hace tan especial a los cristales metálicos?
Algunas de las características por las que destacan los cristales metálicos con respecto a otro tipo de cristales comunes son:
- Son buenos conductores del calor y de la electricidad
- Son opacos a la luz visible
- Tienen un brillo metálico. Esto se debe a que sus superficies pulidas son altamente reflectantes
- Son una muy buena opción para aplicaciones estructurales, ya que son resistentes pero deformables
- Algunos de ellos suelen tener propiedades magnéticas
- Son resistentes a la corrosión
Ejemplos de cristales metálicos
Aprovechando las propiedades físicas, eléctricas, mecánicas y magnéticas de los vidrios metálicos, los podemos encontrar en diferentes aplicaciones. Estos son algunos ejemplos de cristal metálico y su aplicación.
Transformadores de energía
Debido a sus bajas pérdidas, los cristales metálicos son utilizados en núcleos de transformadores. Lo que se hace es reemplazar los núcleos ferromagnéticos de ferrita. De esta manera se optimiza la eficiencia, mejorando la economía de servicios públicos. Gracias a sus propiedades físicas y magnéticas, los vidrios metálicos combinan la fuerza y la dureza con la flexibilidad y la resistencia.
Sensores magnéticos y cabezas de grabación
Gracias a este tipo de cristales se puede obtener bajo campo coercitivo. Asimismo, la ausencia de bordes de grano en este material permite la facilidad de movimiento de las paredes de los dominios. El borde de grano o límite de grano es la superficie de separación entre dos cristales de un mismo grano policristal. Un policristal es un agregado de pequeños cristales de cualquier sustancia.
El vidrio metálico resulta un material atractivo en aplicaciones magnéticas. Asimismo, proporciona una fuente mínima de pérdida de energía, por su pequeña área del ciclo de histéresis.
Sistemas microelectromecánicos o MEMS
Este concepto hace referencia a la tecnología electromecánica de dispositivos microscópicos, sobre todo los que tienen partes móviles. Se emplea en la fabricación de condensadores para aplicaciones de microondas y ondas milimétricas, en las que se ha encontrado baja pérdida.
Carcasas para dispositivos portátiles
Gracias a su alta relación entre la resistencia y el peso, y a su alto grado de elasticidad, el vidrio metálico es empleado en carcasas de equipos.
Industria aeronáutica y automovilística
Se trata de un material que presenta superficies resistentes a la corrosión y al desgaste mecánico, así como su alta relación entre la resistencia y el peso. Es por eso que suele emplearse en partes de las alas de los aviones y en partes de automóviles.
Biomateriales
Gracias a su gran resistencia a la corrosión, la mayoría de los vidrios metálicos se utilizan como biomateriales para implantes óseos y dentales.
Conclusión
Como hemos podido comprobar, los cristales metálicos tienen una serie de propiedades que los hacen muy diferentes respecto al resto de vidrios y cristales comunes. Gracias a esas propiedades, se convierten en materiales únicos para diferentes aplicaciones, lo que les hace tener un gran potencial. Vidriopanel: paneles de vidrio a medida para cocinas, baños y mesas.