Desde hace algún tiempo hemos hablado de las múltiples opciones que existen para darle una segunda vida al vidrio: desde formas de reciclar el vidrio o emplear botellas de cristal, hasta inspirarte en diversas manualidades de vidrio. Pero hoy no hablaremos sobre cómo hacer manualidades en casa con el cristal, sino que buscaremos usar el vidrio desde un punto más artístico. Porque puede ser un complemento que haga nuestro hogar completamente único. Así que hoy hablaremos sobre cómo hacer un vitral en vidrio para nuestra vivienda.
¿Qué son los vitrales?
Antes de proseguir y explicar cómo hacer un vitral en vidrio, debemos explicar qué son los vitrales. Es posible que esta palabra no os suene, pero básicamente se tratan de vidrieras de colores que pueden ser pintados o tratadas con técnicas como el lacado o esmaltado. Sea como fuere, los resultados que se obtienen son completamente alucinantes. De echo, seguro que has visto grandes vidrieras famosas como las de la Sagrada Familia o Sainte-Chapelle, entre muchas otras.
Pintura para hacer un vitral
Si quieres saber cómo hacer un vitral, lo primero que necesitas es saber qué pintura utilizar. Una de las más extendidas y famosas es la de Lefranc, que cuenta con un total de 22 colores que ofrecen una gran transparencia y brillo. Estas características las hacen ideales para decorar cualquier vidrio pero también otros materiales como el plástico. Se comercializa en pequeños frascos de 50 ml y en otros más grandes de 250 ml y son muy versátiles, ya que se pueden mezclar sin perder sus propiedades.
Pasta de relieve para vitrales
Además de la pintura, también es necesario contar con otros materiales para saber cómo hacer un vitral. Uno de los imprescindibles es el cerné, que nos servirá como delimitador para la pintura. Básicamente es una pasta que sirve para sellar las diferentes zonas que compongan nuestra vidriera. De este modo, podremos conseguir el aspecto de las vidrieras que usan el metal pero de una forma más fácil y directamente desde casa.
Hacer mi vitral paso a paso
Preparar la superficie
Nos ponemos manos a la obra para resolver la duda sobre cómo hacer un vitral en vidrio. Lo primero pasa por preparar la superficie, para lo que tendremos que limpiarla a conciencia. Podemos usar jabón y agua y después utilizar un trapo que no desprenda fibras para secar. Es importante que la superficie quede completamente limpia y sin restos de nada sobre ella.
Diseñar el vitrales
El segundo paso tiene que ver con el diseño que queremos realizar. El hecho de que sea para un vidrio nos hará fácil el poder calcar directamente lo que queramos plasmar en él. Lo más fácil es utilizar pasta de relieve para vidrios, lo que nos ayudará posteriormente a la hora de pintar. Es aconsejable que los trazados sean finos y bien definidos.
Pintar a tu gusto
Una vez hayamos aplicado el cerné y tengamos todos los pasos previos realizados, llega el turno de pintar. En este momento podemos dejarnos llevar por nuestra creatividad y aplicar los colores que más nos gusten e incluso mezclarlos como consideremos oportuno. Basta usar un pincel y rellenar la sección con el color que queramos.
Recomendaciones
- Si queremos generar una apariencia marmolada, solo tendremos que mezclar dos colores en un mismo sector.
- Es posible añadir sensación de movimiento aplicando dos capas de color. Una primera normal y, cuando se seque, una segunda mancha de color.
- Además del cerné, también podemos utilizar para delimitar nuestros diseños sobre vidrio tiras de plomo adhesivas. Esta opción es muy recomendable sobre todo para las líneas rectas.