A la hora de elegir los muebles para nuestra vivienda, cada vez tenemos a nuestra disposición más tipos y estilos. Podemos elegir la madera, el cristal o vidrio e incluso la chapa natural. Cada uno de ellos cuenta con diferentes beneficios e inconvenientes. Y además de poder elegir el tipo de mueble del material que más nos guste, también podemos seleccionar el acabado que más vaya con nuestro estilo. Existen prácticamente tantas opciones para decorar nuestra casa como gustos.
Uno de los materiales más demandados durante los últimos tiempos para los muebles y diferentes accesorios del hogar es el cristal. Se trata de un tipo de material que nos ofrece una gran cantidad de opciones y ventajas. Hasta tal punto que muchas personas optan por intentar conseguir acabados similares para los muebles de sus casas con barnices de efecto cristal. Sin embargo, esto no siempre resulta una buena idea y te contamos los motivos.
El acabado no es el mismo
Aunque con los barnices normalmente se consiguen acabados increíbles para los muebles, sobre todo en las maderas, optar por ellos para obtener un acabado similar al del cristal no es la mejor opción por la que puedas decantarte. Aunque den más brillo al mueble sobre el que lo vayas a utilizar, nunca será el mismo que el que conseguirías con una lámina de vidrio o cristal directamente. ¿Por qué conformarse con una imitación cuando puedes tener el original?
Es difícil de retirar
A lo largo de nuestra vida decidimos hacer cambios en nuestros muebles: ponerles cosas encima, pintarlos, modificarlos… Puede que inicialmente aplicar un barniz con efecto cristal te parezca una gran idea. Sin embargo, en el momento en el que te canses de su acabado te resultará muy difícil deshacerte de él. Y esto te dejará con dos opciones: mucho trabajo para eliminarlo o, directamente, comprar un mueble nuevo.
Requiere más trabajo
Si quieres efecto cristal en una mesa, siempre puedes añadir de forma cómoda, barata y rápida una lámina de vidrio o cristal sobre ella. Sin embargo, con el barniz tendrás que aplicar varias capas de forma correcta y esperar a que esté seca al 100% para volver a utilizarlo. Esto hará que tengas que perder mucho más tiempo que si te decides por otro tipo de opciones para tus muebles.
Mantenimiento
Normalmente los muebles de nuestra casa requieren un mantenimiento para que luzcan como el primer día. Suele ser algo simple, como limpiarlos periódicamente al igual que el resto del hogar. Sin embargo, con el barniz la cosa cambia. El mantenimiento es más complicado y es posible que en el futuro tengas que volver a aplicarlo para que vuelva a estar como en el primer día.
Por esta serie de razones nos parece que optar por el barniz con efecto cristal no es recomendable. Y es que, para conseguir un acabado como el que obtendríamos con el vidrio y el cristal, mejor optar por estos últimos directamente. Tal y como explicamos en este post sobre cristal para mesas, no todo sirve. Si quieres conocer las principales ventajas de utilizar cristal en tu hogar para mesas y otros muebles, echa un vistazo a este artículo de Homify.